jueves, 9 de septiembre de 2010

GARZON Y COLLAZOS - Flor del campo

Teatro Junin, donde hoy existe el edifikcio Coltejer. En este teatro se prestaron en varias ocaciones Garzon y Collazos.


LADO A


1 -VIVA LA FIESTA
2-HURI
3-FLOR DEL CAMPO -
4-VEN QUE TE ESPERO MORENA
5-ROSALINDA
6-LA VAQUERITA

LADO B
1 -IBAGUEREÑA
2-NEGRITA
3-EL CONTRABANDISTA
4-SUFRO QUERIENDOTE
5-RUMORES DE SERENATA
6-SOY TOLIMENSE

SUFRO QUERIENDOTE IBAGUEREÑA FLOR DEL CAMPO
El legado de Garzón y Collazos

por Luis Enrique Aragón Farkas

Con estas canciones nacidas en Ibagué, y otras de compositores de provincia como Adolfo "El Pote" Lara (Tupinamba), emprendieron una gira con la compañía de otro grande entre los tolimenses, Carlos Emilio Campos "Campitos". Recorrieron la geografía nacional, y en 1947 grabaron su primera serie de discos, que sería un éxito histórico. Renacieron con ellos los aires andinos colombianos en las décadas de 1940 y 1950. Fue otra época de oro, que recuerda aquella impulsada por Morales Pino en Bogotá. Su producción posterior incluyó obras de compositores nacionales como Luis Dueñas Perilla y Luis M. Forero, y regionales como Cantalicio Rojas, de Natagaima, Anselmo Durán, de Neiva, Luis A. Osorio y una hermosa joven que se perfilaba como una de las más prolíficas compositoras de Ibagué: Leonor Buenaventura. Vinieron entonces las giras internacionales. Garzón y Collazos lideraron la representación del interior del país, conjuntamente con los duetos paisas Obdulio y Julián y Espinosa y Bedoya, entre otros. Se crearon nuevos duetos, como Los Tolimenses y Los Hermanos Martínez, que mantienen el estilo impuesto por el dúo tutelar del Tolima Grande.


Llegó así la última etapa enmarcada por la producción de Jorge Villamil. Espumas es el gran éxito que la inició, en 1962. En esa etapa brilló igualmente la producción de los grandes compositores tolimenses radicados en Ibagué, como Leonor Buenaventura (Ibaguereña), Pedro J. Ramos (Ora si entiendo por qué), y Miguel Ospina (Dulce coyaima indiana). Esa larga época de oro terminó para Garzón y Collazos en 1977 con la muerte de Eduardo.
Garzón y Collazos, dos tolimenses raizales hechos en la Capital Musical de Colombia, le enseñaron al país a cantar, y al mundo le mostraron cómo cantan los Andes colombianos.

                                                 Tomado de la Revista Diners No.283, octubre de 1993


En la contrapa del L:P: se lee:
Sin lugar a dudas, uno de los mejores duettos que han surgido en Colombia en toda su historia, lo constituyen los ya conocidísimos GARZON Y COLLAZOS, grandes exponentes de los aires típicos nacionales como La Danza, El Sanjuanero, La Guabina, El Bambuco, El Pasillo y otros ritmos de nuestra patria. Este Long-Play ya había sido publicado años atrás por la firma de los éxitos fonográficos, SELLO VERGARA, pero con otra carátula distinta y por supuesto antigua y de mala presencia técnica, pero debido al gran impulso que han tenido estos artistas sobre todo en el exterior, nos hemos visto precisados a cambiar su portada para que así, deacuerdo a la calidad de sus interpretaciones, vaya acompañado de una presencia más adecuada.
Para todos los amantes de la música netamente colombiana, deseamos que el contenido de este disco satisfaga los más refinados gustos.

Esta portada era:

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