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jueves, 24 de noviembre de 2011

ANGEL D'AGOSTINO-ANGEL VARGAS -Los 2 Angeles del Tango.

Panorámica de Medellín en 1926

Autor: Francisco Mejía
© Biblioteca Pública Piloto de Medellín para América Latina

Su interior. De sur a norte encontramos primero, el sotacoro o pronave, área ubicada bajo el coro y las torres, antecede a las naves longitudinales y es una especie de vestíbulo o recibidor; en él se encuentran las pilas de agua bendita, dos estaciones del vía crucis y en los extremos oriental y occidental se encuentran dos ábsides de forma trapezoidal (trapecio isósceles) abovedado, cada uno contiene un retablo de mármol y están cerrados por canceles (rejas). Igualmente, cada ábside cuenta con dos puertas que dan con las escaleras contenidas entre los muros y que comunican con el coro y las torres, además el occidental tiene un ascensor marca Otis que fue colocado 1933, costó 15.000 pesos de la época y aun funciona perfectamente.

LADO 1
EL CORNETIN DEL TRANVIA - Tango
CUANDO SE HA QUERIDO MUCHO - Tango
GORRIONES - Tango
QUIEN TUVIERA 18 AÑOS - Tango
TODOS TE QUIEREN - Milonga Tangueada
LA CARRETA

LADO 2
YO SOY DE PARQUE PATRICIOS - Tango
ME LLAMAN TANGO - Tango
DESTELLOS - Tango C
COMPADREANDO - Milonga
EL CCCHERITO - Tango
CANTANDO OLVIDARE - Tango

____


QUIEN TUVIERA 18 AÑOS


COMPADREANDO


TODOS TE QUIEREN


“Vos que fuiste de todos el más púa
 batí con qué ganzúa
plantaron tus hazañas..."

¿Es acaso que exista una sola persona de aquella época imborrable que no recuerde este verso del, tango No Aflojes'?

Habrá transcurrido mucho tiempo desde aquel 13 de noviembre de 1940 —ahora en 1961, se cumplirán 21 años— pero ese "campanazo" logrado en el disco número 39.136 rebasó los limites más optimistas y arrolló con la opinión de los escépticos que no creyeron en la continuidad del éxito inicial que se completó con aquello de...

"Muchacho
que porque la suerte quiso
vivís en un primer piso de un
palacete central..."

Este —Muchacho— y aquélla, salieron a pulsar la opinión del pueblo y lo conquistaron en grado sumo. Dos obras condensadas en un disco que fue la punta de lanza que abrió senderos de popularidad para un binomio que nació a la consideración del pueblo que lo erigió inmediatamente en ídolos indiscutidos del acervo ciudadano.

Ese binomio fue el que constituyeron Angel D'Agostino con su cantor Angel Vargas, verdaderos artífices de una gloria enaltecedora para la musa de Buenos Aires. ¿Pero ése fue el punto inicial de la trayectoria artística de ambos? Claro que no. La unión efectiva de "Los Dos Angeles del Tango" se produce en el año 1932.

Angel Vargas cantaba con el cuarteto de Armando J. Cohsani y en una reunión que animaban en la ciudad de Quilmes, provincia de Buenos Aires, conoció a un señor que lo llamó a su mesa, en uno de los descansos y le propuso ocuparse de él, para que escalara posiciones. Este señor era pariente de las hermanas Paulina y Berta Singerman y se identificó como amigo personal del maestro Angel D'Agostino, que en esos momentos actuaba al frente de una orquesta mixta en el teatro Cómico, con la compañía Cicarelli - Bustos - Mutarelli. D'Agostino lo incluyó en el elenco.

Poco después se agrega a la nómina la sala del cine teatro Florida, donde obtuvieron sensacionales triunfos que los llevarían en rápida sucesión, a los escenarios de los cines Buen Orden y Carioca y más adelante al Restaurant - Dancing Chantecler de Paraná 440 —ya demolido— para seguir acumulando popularidad, con un conjunto que ya se había transformado en orquesta típica a partir de las actuaciones en el Florida, y actuando también en "El Vieux París" —como se le decía al Chantecler.

Recién a fines del 40 realizan su primer disco juntos y ya cité la trascendencia de esa grabación en los párrafos iniciales. Es uno de los pocos casos —si no el único— que llega a la radiofonía precedido de una apoteosis triunfal, producto de ese primer trabajo de D'Agostino-Vargas para la discografía nacional.

A mediados de 1941, entran por la puerta grande de la radiodifusión, incorporándose a la emisora que les brindara el espaldarazo definitivo y sin discusión, L R1, Radio El Mundo. Ya estaba forjada la merecida fama de resonante amplitud que se fue extendiendo, hacia los cuatro puntos cardinales de la República, agregando al nomenclator de rutilantes estrellas de la música popular, los nombres de "Los Dos Angeles del Tango", Angel D'Agostino - Angel Vargas.

Por repetido, se abrevia la trayectoria que recorrieron juntos ambos artistas, después del impacto del primer disco y su posterior debut radial. Conocen sobradamente los admiradores del binomio, todos los hechos acaecidos hasta el año 1946, en que Angel Vargas hace realidad el sueño de la orquesta propia, conjunto que sostuvo hasta el mismo año de su muerte, tan inesperada.

Al cumplirse el segundo aniversario de su lamentada desaparición, hemos querido rendir homenaje al bien llamado "Ruiseñor de las Calles Porteñas", uniéndolo a través del maravilloso influjo del disco, al nombre de su director y amigo, Angel D'Agostino, para que aquellos que con su aplauso los elevaron al primer plano de la irrefutable fama, puedan revivir al son melancólico de un elenco personalísimo, las horas de un tiempo sin parangón para la historia del tango argentino que tuvo y tendrá en "Los Dos Angeles", a los más fieles traductores del sentir del pueblo...

"Qué decís, que un tango rante
no te hace perder la calma
y que no te llora el alma
cuando gime un bandoneón...".

Una nota de Antonio Cantó.

martes, 16 de noviembre de 2010

ANGEL VARGAS - El Ruiseñor de las calles porteñas

Muerte de Carlos Gardel y de de otras personas el 24 de junio de 1935. Medellín.


LADO 1
1 - ZAPATITOS DE RASO - Milonga  - F. Caprio - J. Dragona
2 - CASCABELITO - Tango  J. Caruso - J. Bohr
3 - NUNCA MAS                Tango     O. Lomuto - F. Lomuto
4 - EL CHOCLO - Tango               E. S. Discépolo - C. M. Catán - A. Villoldo
5 -CARNAVAL DE MI BARRIO - Tango Luis Rubistein
6 - PIEDAD – Tango  L. de Biase

LADO 2
1 . QUIEN TIENE TU AMOR - Tango  Leopoldo Díaz Vélez  
2 - CUARTITO AZUL – Tanqo  M. Batlistella - Mariano Mores      
3 - CICATRICES – Tango  E. P. Maroni - A. Avilés
4 - LANGOSTA – Tango                J. A. Bruno - Juán de Dios Filiberto
5- REJAS Y GLICINAS – Vals   C. J. Vidal - U. Menti - S. Saúco
6 - MORENITA MIA Tango  E. Cadicamo.




QUIEN TIENE TU AMOR


EL CHOCLO


CICATRICES




Pocos cantantes se han identificado tan plenamente con Buenos Aires como este  Ángel Vargas, calibrado por los expertos más exigentes del tango con la misma magnitud de un Magaldi, de un Corsini, de un Fiorentino, de todos esos que han seguido a la eternidad al maestro inconmensurable: Carlos Gardel.

Y es que el acento porteño en la voz de Ángel Vargas, su apostura, su sentido profesional, la emoción de su repertorio, todo,' todo, evocaba en él la típica estampa del bohemio de barrio.

Ángel Vargas irrumpió en el mundo de la canción argentina con fuerza estelar como vocalista de la Orquesta típica de Ángel D' Agostino. Y con ella hizo toda una época de la canción ciudadana, desde 1932 hasta 1947.

Fueron los favoritos absolutos del Buenos Aires bailador y milonguero y retrataban en sus interpretaciones cada barrio, cada personaje, cada suceso que conformaba la gran ciudad, tan feliz entonces, en pleno auge, cuando se fue desenvolviendo como la gran Metrópoli de América Latina.

Ángel Vargas nació en la Capital Federal el 22 de Octubre de 1904 y se llamaba en realidad José Lomio Michelli.

El seudónimo nació en parte como un homenaje a su poeta favorito, el colombiano Vargas Vila.

En la bravía barriada del Parque los Patricios, uno de los más típicos lugares del Buenos Aires de siempre, donde nació, transcurrieron los primeros años del hijo del “taño" Salvador Lomio y de su esposa, Magdalena Michelli de Lomio.

Eran los tiempos, 1910, de los payadores que improvisaban versos con música en los cafetines suburbanos. Y alboreaba el auge de Gardel-Razzano.

Fue así como el futuro" ruiseñor" a quien ya desde entonces le gustaba cantar, aprendió a entonarse con los versos amorosos de Andrés Cepeda y de Betinotti.

Su familia se trasladó a Avellaneda y Ángel se colocó en un frigorífico para ayudar a la manutención de los suyos, actuando también como futbolista en los días libres.

A los 20 años de edad, animado por el éxito ante sus compañeros de trabajo se metió de lleno en el tango, presentándose en clubes modestos con acompañamiento de guitarras. Y tres años más tarde se incorpora como cantor de un cuarteto típico dirigido por Armando J. Consani y hace una jira con ellos por la localidad de Tandil.

 Con este grupo, denominado Cuarteto Consani, Ángel Vargas habría de hallar además de bien ganadas ovaciones, el punto decisivo de su carrera artística.

Fue en Quilmes, después de una serie de tangos que interpretó durante la entrega final del baile, donde halló a un pariente de Paulina y Berta Singerman, quien entusiasmado prometió conectarlo con Ángel D'Agostino, cuya orquesta acompañaba desde el foso a una importante compañía teatral.

Vargas pasó la prueba con calificación sobresaliente y se incorporó a D' Agostino.

Eran los tiempos en que las orquestas típicas, y las bandas de jazz, denominadas también "características", actuaban en los entreactos de las compañías teatrales y animaban la oscuridad de los salones cinematográficos cuando el cine era mudo.


Era ese el trabajo habitual de D- Agostino y sus muchachos, y era en esas actuaciones donde Ángel Vargas iba plasmándose como ídolo absoluto del tango.

Unos meses antes. Ángel Vargas había colaborado también brevemente con el conjunto típico Lando - Mattino, desde el escenario del Café Mazzoto, y en algún paréntesis de su actuación con D' Agostino ingresó a las huestes de José Luis Padula con quien hizo, según parece, sus primeras incursiones discográficas.

Sin embargo fue en 1939 cuando grabo su primer disco como solista, para la RCA Victor.

En el mes de abril de 1939, Ángel Vargas hizo un disco de prueba en los tiempos de la Orquesta Típica Víctor: "Milongón" y "La Bruja", el primero acompañado por la celebrada agrupación orquestal estable de la grabadora y el otro con respaldo de guitarras No pasó nada.

Hasta el año de 1940, cuando, consagrado el conjunto por los éxitos continuados que obtenía en las noches del Chantecler, y teniendo en cuenta que todo  Buenos Aires se hacía lenguas de los dos "ángeles" que le habían nacido al tango en  aquel local inolvidable. Radio El Mundo y la RCA Víctor los presentaron con carácter  estelar. ''Muchacho" y "No Aflojes", los tangos que marcaron el debut de Ángel  Vargas y Ángel D' Agostino en el mundo fonográfico, hicieron un disco dóbleme histórico. Por las ventas que subieron a una cifra inconcebible y porque fue el principio de una era del tango. Tras ellos, vinieron, "Adiós Arrabal", "A pan y agua" esquinas" “Tres esquinas” y muchos otros que conforman parte valiosísima del archivo de oro de nuestra marca. Fecha de aparición: 13 de noviembre de 1940.

La sociedad finaliza en el año de 1947 al regresar de una jira por la región cuyana. Y en 1948, con su propio conjunto dirigido por el bandoneonista Eduardo del Piano, graba en su nueva etapa para la Víctor el tango "Se lustra señor", principio de nuevas y felices actuaciones grabadas.

Armando Lacava, Toto D'Amario, Luis Stazo y José Libertella son posteriormente,  los directores de su conjunto.

A fines de junio de 1959. Ángel Vargas graba su último disco. “La Cieguita” y ''La Porteñita", tango y milonga respectivamente. Había proyectado hacer un nuevo  Long Play con el guitarrista Roberto Grela cuando lo sorprendió la muerte.

En pleno apogeo. Cuando Buenos Aires entero lo aclamaba noche a noche a donde quiera que actuaba. En el medio día el martes 7 de julio de 1960, en el Sanatorio Bosch y en el preciso instante en que se le practicaba una intervención quirúrgica.

Efectivamente.

Tras de 15 años de actuación triunfal como vocalista independiente, Vargas figuraba todavía, según las encuestas de revistas especializadas, entre los cinco primeros y más gustados intérpretes de la canción ciudadana.

Había ido, en realidad de superación en superación. Su modalidad se había estilizado, y su voz, siempre potente, lucía impresionante en los matices y pianísimos que lo distinguieron.

Su repertorio, en un alto porcentaje, estaba compuesto de tangos que evocan sitios típicos del Buenos Aires de ayer, o personajes del arrabal porteño o momentos determinados de la vida de la gran ciudad.

"Zapatitos de Raso" es la milonga florida a la muchacha Cabaretera, bullidora y gentil. "En Cascabelito" y en "Carnaval de mi barrio" evoca las fiestas de principio de año, los célebres "carnavales" que configuran uno de los aspectos más pintorescos del Buenos Aires tradicional. El "Langosta" es el matón arrabalero que parece escapar de una vieja estampa de los veintes. En "Cuartito Azul", página maestra de  Mores, aparece pintado con trazos de amargura ante el cambio de vida, la buhardilla bohemia. "El Choclo" es un himno al tango. "Cicatrices" el tango clásico." Rejas y glicinas", el canto a la sentimental serenata de ayer. En "Piedad" .ay una cálida evocación del amor de la mujer por su hombre. Y "Quién tiene tu amor", uno de los últimos que grabó y "Morenita Mía", fueron, con "Nunca más", creaciones que le valieron a través de su vida artística, ovaciones sin cuento.

Poco tiempo después de aparecido en Buenos Aires este L.P, ocurrió su lamentado deceso. Aquí había dejado un recuento de sus éxitos favoritos. La consagración de su estilo, de este tango que en su voz sabe más a tango.

Escúchenlo bien, Vale la pena regodearse con la exquisitez de este intérprete. Gustar sus finales, su delicada media voz, la riqueza de expresión que había en Ángel Vargas.

Nota: Hernán Restrepo D.