Autor Gabriel Carvajal Pérez
Bilioteca Pública Pliloto de Medellín.
TANGO DE AYER
RCA Argentina, que guarda en sus archivos una gran parte de la historia del tango, a través de grabaciones que en su momento realizaron los grandes de nuestra música, tiene el orgullo de presentar esta nueva serie, sumándose a los homenajes que se rinden a Buenos Aires.
Enfrentarnos con estas legendarias grabaciones nos propone un encuentro con el pasado, la nostalgia y en muchos casos, el deslumbramiento, ante el cálido sonido de estas orquestas y estos músicos. Podemos asombrarnos, para citar algunos nombres, al escuchar el inconfundible violín de Elvino Vordaro, el fueye de Petrucelli, el piano de Francisco De Caro, el fraseo de Ciríaco Ortiz; en suma, las creaciones de todos estos grandes, que en ese ayer no tan lejano, tal vez no pensaban que estaban escribiendo un importante capítulo de la historia de la música de Buenos Aires.
Creemos sinceramente que estos valiosos registros vuelven hoy a su legítimo destinatario, el público, y el rescate de estas joyos de nuestra querida música, produce verdadera satisfacción: por ser nuestra, creada por estos auténticos virtuosos de su época (luego algunos serían famosos), y porque gracias al milagro del disco, podemos disfrutarlos hoy como en su momento lo hizo el público de aquellos tiempos heroicos.
A. OIACOMETTI
Las grabaciones que guardan las interpretaciones de estos pioneros del tango, fueron realizadas en épocas cuando las técnicas avanzadas de hoy eran desconocidas, sin embargo se ha tratado de reconstruir el sonido original sin deformaciones, tratando de mejorar en lo posible los viejos registros. Creemos que esta valiosa reseña nos entrega el sonido original de la época y su calidad es secundaria a la emoción de poder acceder y escuchar estas grabaciones —algunas, verdaderas reliquias— de estos maestros del tango.
LADO 1
1. TODO CORAZON - Tango (Julio De Caro • José M. Ruffet)
2. AGUA CORRIENTE - Tango (Juan Rodríguez)
3. MOSCA BRAVA - Tango (Dalmiro Pereyra)
4. LA PLEGARIA - Tango (Emilio De Caro)
5. MALA JUGADA - Tango (Luis D'Andrea)
6. LA CASITA ESTA TRISTE - Tango (Luis Berstein • José De Grandis)
LADO 2
1. MALICIOSA - Tango (Luis Petrocelli)
2. ACORDATE GIL - Tango (A. Bacciale]
3. EL ABROJITO - Tango (Luis Berstein - Jesús Fernández Blancní
4. MOCOSITA - Tango (Gerardo Matos Rodríguez - Víctor Solifio)
5. POBRE CANTOR - Tango (Raúl Ruiz Moreno],
6. CANDILEJAS - Tango (Enrique Ursini)
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MOCOSITA
LA PLEGARIA
TODO CORAZON
El tango tiene el privilegio de algunos nombres predestinados para la consagración. JULIO DE CARO es uno de ellos. Artista excepcional, creador indiscutido —fallecido recientemente a los ochenta años—, hace casi seis décadas encabezó el más importante movimiento de transformación musical del tango.
Hacia 1924 una profunda conmoción sacudía los rudimentarios esquemas instrumentales del tango. JULIO DE CARO tomó la iniciativa de reunir en torno de una orquesta, cuyos lineamientos esenciales trazara poco antes Juan Carlos Cobián, a un selecto núcleo de músicos jóvenes y talentosos, que se llamaron Pedro Maffia, Francisco y Emilio De Caro, Luis Petrucelli, Leopoldo Thompson. Manlio Francia (luego Pedro Laurenz, Armando Blasco, Vicente Sciarreta, José Niesow), quienes, sin proponérselo, estructuraron una escuela, la única escuela instrumental del tango. Sobre la consabida fórmula de que "el tango es también música", afloraron todas las ideas, todas la inventiva creadora, de perdurables conceptos de ejecución. Y se inventaron —por así decirlo— para siempre, todos los recursos y los secretos instrumentales, cuyas influencias mantienen en la actualidad plena vigencia, incluso entre los músicos de las más recientes hornadas tangueras, lamentablemente proclives a distorsivas deformaciones de un género musical popular tan definido como el tango rioplatense.
Foto: Sexteto Julio De Caro (1928). Izq. a der.: Julio De Caro, primer violín y dir. Emilio De Caro, violín. Armando Blasco, bandoneón. Francisco De Caro, piano. Pedro Laurenz, primer bandoneón. Vicente Sciarreta, bajo.
Es posible afirmar, sin incurrir en excesivas concesiones valorativas, que así como Carlos Gardel creó la única manera de cantar el tango, la escuela decareana de ejecución, no solamente estructuró las definitivas formas interpretativas, sino que atrajo el interés de notables cultores de posteriores promociones —desde Vardaro a Troilo, desde Pugliese a Gobbi, desde Demare a Salgán— cuyos destinos artísticos otros habrían sido seguramente, de no haber existido la escuela decareana.
La Irrupción en nuestro medio del renovador sexteto de JULIO DE CARO, habría de proyectarse —para fortuna de la historia del tango— en una intensa y brillante trayectoria discográfica, que a más de medio siglo de aquel auspicioso acontecimiento artístico, permite ahora una interesante, veraz y aleccionadora recapitulación de cuanto hicieron JULIO DE CARO y sus magníficos colaboradores de la gran empresa de superación estética del tango. Y fueron, precisamente, los catálogos de la entonces compañía Victor —actual RCA— las que atesoraron cuanto ideó, realizó y consagró aquella quijotesca aventura de la llamada escuela decareana, que hoy —a más de medio siglo de distancia— valoramos y admiramos en toda su dimensión evolucionista.
En este larga duración que lanza RCA, con cabal sentido de la importancia emocional y artística que ello comporta, se reproducen —con las huellas ineludibles del tiempo transcurrido y la precariedad de los incipientes medios de grabación discográfica— páginas memorables, versiones señeras, registradas para siempre por aquella orquesta de maestros encabezada por JULIO DE CARO.
Importantísimo, debemos reiterar, el contenido de este invalorable larga duración. Figura, pues, entre otros motivos de interés, la primera grabación discográfica de la orquesta de JULIO DE CARO. Su tango "Todo corazón". Y la interesante curiosidad de ser el único registro en que interviene el bandoneonista Luis Petrucelli, junto a Pedro Maffia, fundadores ambos del conjunto. A partir del siguiente registro, es ya Pedro Laurenz quien ocupa su lugar en la orquesta. Y otra curiosidad. La difícil responsabilidad del segundo violín —fundamental para la realización de los contracantos— no estuvo a cargo de su ejecutante titular Emilio De Caro en la labor, del disco, por la apagada sonoridad de su manera de ejecutar. En todo el ciclo de "Discos Victor" intervino Manlio Francia como segundo violín, figura de relevante trayectoria profesional. Y que es posiblemente el ejecutante que en mayor cantidad de grabaciones intervino en toda la historia de la discografía argentina.
El contenido, pues, documental y artístico de este larga duración, reviste el alcance de un sentido y emocionado homenaje a la memoria de JULIO DE CARO. Con su violín corneta del lánguido portamento, con su orquesta creadora que dictó cátedra del mejor tango instrumental a lo largo de treinta años, con sus grandes tangos. Los tangos debidos a la inspiración inagotable de JULIO DE CARO. Todo lo cual encierra uno de los capítulos fundamentales de la historia de nuestra música popular.
LUIS A. SIERRA
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