Parque de
Berrío en 1967. A la isquierda Calle Boyacá entre Palace y Junin
-Gabriel Carvajal Pérez
-BPPM
1 -Reina mora
2 -Cabellera blanca-
3 -Júrame
4 -La feria de las flores
5 –Alhambra-
6 -El adiós del
marino-
7 -Llorar eterno
8 -Lamento borincano
LLORAR ETERNO
JURAME
REINA MORA
NUESTRO país
conserva un gratísimo recuerdo de la personalidad del doctor Alfonso Ortiz
Tirado, quien, aparte de sus relevantes condiciones de caballero y su
significación en el campo de la medicina, tiene un don que prende con lazos
indestructibles en la general simpatía. La afabilidad del doctor Ortiz Tirado
podrá ser conocida a fondo en los círculos más o menos ceñidos del trato
directo, v su faina de primer especialista mexicano en osteología considerada
en los ejercicios limitados de la ciencia; pero el cantante con registro de
tenor que entona con gusto exquisito REINA MORA y el que anega de emotividad
los corazones con las estrofas de CABELLERA BLANCA:
Junto a la
chimenea,
donde hay
feria de lumbre,
reza la
viejecita
sus cosas de
costumbre ...
ese tenor que
llevó a los distintos pueblos iberoamericanos la verdad bella e inspirada de la
canción melódica de las tierras centrales del continente; ese excepcional
mensajero lírico, pertenece a toda la comunidad que lo ensalza y lo alienta.
El disco
ODEON ha sido, a su vez, propalador del arte miniaturista y delicioso de Ortiz
Tirado, y. desde muchos años atrás, canciones corno ALHAMBRA y como DUERME:
Sueña, sueña,
mientras yo te arrullare
con el
hechizo de esta canción
que para ti
forjé . . .
se han
multiplicado en los discos comunes. Era sobreentendido, entonces que el
distinguido cantor de las endechas aztecas y antillanas no estaría ausente del
moderno disco microsurco y aquí lo tenemos en una programación de ocho obras. A
las cuatro ya citadas, se agrega un vals de intencionada letra muy “charra” LA
FERIA DE LAS FLORES:
En mi caballo
retinto
he llegado de
muy lejos
y traigo
pistola al cinto
y con rila
doy consejos ..
Y hacen el
total del disco dos boleros: LLORAR ETERNO —pieza de repertorio por su probado
éxito- y el no menos difundido que se titula EL ADIOS DEL MARINO:
Se acerca la
partida:
yo me debo
marchar,
esto ha sido
un descanso
para mi eterno
peregrinar…
Cerrándose el
contenido de la placa con una de las canciones más típicas y celebradas que
pueda mostrar el cancionero de las Antillas: el LAMENTO BORINCANO del
“jibarito" portorriqueño que ancla los caminos silvestres del amanecer
Sale, loco de
contento,
con su
cargamento.
para la
ciudad… ay,
para la
ciudad . . .
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Ha sido con
atractivas embajadas de canciones como éstas que recoge ahora el disco de larga
duración, que el doctor Alfonso Ortiz 'Tirado ha desempeñado una artística
diplomacia representativa entre los países americanos y ha hecho más eficaz de
ese modo una misión para la cual ya tenía los atributos imponderables de su fineza y su cultura.
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