Panoramica Parque de Berio 1954
LADO 1
1. TITINA. - Fox Trot -León Doniderff -JOSE MORICHE
2. DE MI TIERRA.- Fado -E. Manuella -MARGARITA CUETO
3. EL BESO DEL SOLDADO, ó ADIOS PILAR. –
Canción -M. Jovés -JUAN PULIDO
4. NOSTALGIA. – Canción -Carlos Maduro -MARGARITA CUETO y JUAN PULIDO
5. TE QUIERO. – Jota -J. Serrano
-JULIAN MARIO OLIVER
6. LA ENCANTADORA – Marinera -Arr. Benigno Bellón Farfán -BLANCA ASCENCIO y CARLOS MEJIA
7. CACEROLA.- One Step -D. P.
ONOFRE VIDAL con Orq. Internacional
LADO 2
1. NERON. – Shimmy -M. Valdez - E. Iribarne -JUAN PULIDO
2. OJOS RISUEÑOS. – Tango -Julio Fonseca -JOSE MORICHE
3. ESTRELLITA. – Canción -Manuel M. Ponce -MARGARITA CUETO
4. MORIR POR TU AMOR. – Vals - Belisario
de J. García -JUAN PULIDO y JOSE MORICHE
5. BESAME EN LA BOCA. – Tango -Eduardo Calvo • J. M. Rizzuti -ANTONIO UTRERA
6. MENDIGO DE AMOR.—Bambuco -Félix Nieto. - Arturo Patiño -MARGARITA CUETO y JOSE MORICHE
7. RIE PAYASO, RIE. -Ted-Florito -RODOLFO HOYOS
Es devolverse muchos años por los senderos que marcaron
la historia de la música popular, oír este disco. Y es grato, sin embargo.
Porque siempre es bueno volver a las raíces y hallar voces que marcaron
históricos momentos del arte melódico. Y comparar, y admirar cuánto había que
luchar para conseguir una buena grabación en aquellos años lejanos, cuando
apenas comenzaba a ensayarse el sonido eléctrico y no existían los recursos
electrónicos de la época presente.
Los discos de la serie de NOSTALGIAS MUSICALES son casi
siempre de los años veinte, en los finales. Fonogramas que sirvieron para
pesados, aunque frágiles, discos a 78 revoluciones por minuto que llegaban a
las venerables victrolas, consentidas de aquellas casas solariegas con patios
perfumados de jazmines y de rosas, y acompañaba en las tardes y en las noches
la tertulia familiar, el chocolate parveado de la tarde o la merienda del
recogimiento nocturno.
Los intérpretes, todos, han desaparecido. Unos
oficialmente, otros perdidos en la selva de cemento de una Nueva York fantasmal
que apagó sus últimos cantos y borró sus huellas.
Es el caso de JOSE MORICHE, quien, según la autobiografía
de Marcos Redondo, le acompañó a la América en agosto de 1920. De quien sabemos
que aprovechó el auge fonográfico quizás hasta la exageración en México y en
Nueva York, que en 1934 figuraba en modestos papeles de las películas de Carlos
Gardel y que regentaba un lugar bohemio en Long Island, en donde, quizás,
pasaron sus últimos días, si es que los mismos ya pasaron.
O el de JULIAN MARIO
OLIVER, huésped de Colombia en una de las empresas operáticas de Bracale, y por
allá por el 32 haciendo papeles en compañía que actuaban en Nueva York y sus
alrededores, y paremos de contar. De ONOFRE VIDAL, quien según todos los datos
era, o es, chileno, y participó en célebres jornadas discográficas con la
célebre Orquesta Internacional, haciendo los estribillos.
O el de ANTONIO UTRERA, primo según parece, de Adolfo
Utrera, el de "Aquellos ojos verdes", suicida del año 32 y tenor
exquisito. Este Utrera era barítono y logró importante figuración en el dúo de
Moriche - Utrera que grabó mucha música colombiana y de todos los países
americanos. Solo ocasionalmente actúo como solista y su versión de "Bésame
en la boca" es impecable si miramos el tango como lo que aún era entonces,
a pesar de que ya Carlos Gardel había cambiado las reglas en el lejano Buenos
Aires: zarzuelero, dramático, que fue como lo conocimos por acá, al tango, en
los discos pioneros de Pulido, Moriche, la Cueto, Bonanova, etc.
De los otros sí tenemos más detalles y aun alcanzamos a
conocerlos.
JUAN PULIDO, 'el "Emperador de la canción
popular", que dramatizaba sus cantos e imponía su vozarrón de punta a
punta del continente, había nacido en las Islas Canarias el 19 de junio de
1.891. Recorrió las Américas, hizo centenares de discos, luego se vinculó a la
radiofonía, y finalmente se encerró en un México que lo lanzó al olvido, entre
su apartamento de la calle Edison, que dejó para irse pensionado a un asilo, y
el Auditorio Nacional, del cual fue conserje, para morir el 22 de noviembre de
1972. Pulido vino a Colombia por allá por el 34 con su esposa de entonces, la
recitadora Dalia Iñiguez y fue una de las primeras figuras internacionales que
hizo radio entre nosotros.
También nos visitó alguna vez MARGARITA CUETO, una
excelente soprano de ópera un tanto marginada por su carácter y su físico, pero
una colosal maestra de canta Nacida el 10 de junio de 1.900, murió el 19 de
marzo de 1977. Estuvo muy vinculada a CARLOS MEJIA, quien, siendo profesor de
música y luego de una carrera operática que pudo ser más brillante con un tris
de apostura, falleció también en México, el 27 de abril del 68 a los 76 años.
Mejía aparece haciéndole dúo a una de las grandes de la música mexicana cuando
formó en el Trio Garnica Ascencio. Murió muy joven pero no hemos podido
precisar la fecha.
Y en cuanto a RODOLFO HOYOS, aun hasta hace poco hacía
sus programas radiales en Los Ángeles, con evocaciones de sus años de triunfos
y de aquellas felices temporadas en Nueva York cuando los presentaba un
empresario colombiano. Hoyos quien cantó a dúo con Mojica y fue barítono de
primera línea, nació el 25 de enero de 1896 y murió el 15 de abril de 1983.
Van a gozar mucho oyendo estas canciones con todo y su
técnica precaria. Y Ricardo Jorge Suárez Campos en Chile, y en Costa Rica, esos
admiradores de Moriche y sus "Ojos risueños", un tango tico, que so a
Rodolfo Ramírez, Eladio Jara, Víctor Solano, Marcos González y Mario Picado U.
Y Pablo Dueñas en México, y Jorge Páez, Gustavo Yepes y Guillermo León
Hernández, cuya colaboración estimamos cordialmente, en Colombia.
Es toda una vitrina de cantos añejos que va desde una
"Titína" encantadora que llegó a identificarse con José Bohr, hasta
los excesos de aquel "Nerón", que mereció su inclusión en el
repertorio gardeliano, pasando por temas colombianos tan valiosos como
"Mendigo de amor", la inmortal "Estrellita" de Ponce y
hasta una marinera limeña para que recuerden Horacio Parísí y Américo Márquez
Bernaola cómo sus cantos se van mucho más allá de lo que dicen. Y hasta nuestro
querido Gilbert Mamery, hallará un antiguo canto del Borinquen de los veinte.
Son auténticas nostalgias convertidas en música.
HERNAN RESTREPO DUQUE
No hay comentarios:
Publicar un comentario