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sábado, 17 de enero de 2015

JOSE ALFREDO JIMENEZ -''Mis corridos son de Ustedes''


Sector nororiental del Parque de Berrío en 1932.Calle boyaca.
-Manuel Lalinde
-BPPM

Los dos Generales (02:34)
Sucedió en la barranca (02:57)
La malagradecida (01:54)
Bonito caballo blanco (02:10)
Con la muerte entre los puños (02:57)
Tierra sin nombre (02:55)
Jesús Maldonado (03:05)
Viva Chihuahua (02:51)
José Manuel ''El Borrego'' (02:34)
El arrepentido (02:57)




EL ARREPENTIDO


SUCEDIÓ EN LA BARRANCA


TIERRA SIN NOMBRE


El eterno legado de José Alfredo Jiménez
No tengo trono ni reina
ni nadie que me comprenda
¡Pero sigo siendo el rey!

En San Pedro, cerca de Guaimaral (Bolívar), en Monterrey (México), en Nueva York, en Madrid (España) o en cualquier parte del mundo donde se presente, el trirrey vallenato Alfredo Gutiérrez, referente de la música popular de Colombia, cierra sus actuaciones artísticas -que incluye la ejecución del acordeón apoyado con los pies- interpretando El rey, la obra inmortal de José Alfredo Jiménez.

Esa misma canción le otorgó a Vicente Fernández la consagración como el último gran charro de México y le permitió a Julio Iglesias cumplir uno de sus sueños más anhelados: unir su voz, así fuera gracias a la maravilla de la tecnología, a la de quien considera el más grande creador de la canción popular de América latina: José Alfredo Jiménez.

El rey es considerado por los mexicanos como su canto más emblemático así como su autor el máximo compositor de rancheras y Pedro Infante, su ídolo absoluto.

José Alfredo Jiménez murió el 23 de noviembre de 1973 (recientemente se cumplieron 40 años), pero continúa siendo hasta hoy el compositor de rancheras más prestigiado e interpretado del planeta.
Se dice que El rey se la compuso a Alicia Juárez, el último amor de su vida, y que la cantó por primera vez frente a la ventana de esa bellísima mujer.

Se afirma, también, que José Alfredo y Alicia estaban de pelea la noche de la serenata, razón por la cual la diva ni siquiera se dignó a abrir la ventana para dar las gracias, cosa que hirió profundamente al prolífico compositor.

Alicia Juárez no le dio en su momento a esa canción el valor que sí le otorgó de inmediato el resto del planeta.

INMENSO EN CANTIDAD Y CALIDAD

Prolífica fue la carrera de José Alfredo Jiménez como compositor.

Sus canciones constituyen un genuino legado cultural para la humanidad. Mencionemos algunas de sus grandes piezas, solo algunas: ‘Camino de Guanajuato’, ‘Ella’, ‘El rey’, ‘La media vuelta’, ‘Un mundo raro’, ‘Tu recuerdo y yo’, ‘Tu enamorado’, ‘Serenata huasteca’, ‘Corrido de Mazatlán’, ‘Tú y las nubes’, ‘Que te vaya bonito’, ‘El caballo blanco’, ‘El jinete’, ‘Te solté la rienda’, ‘Sonaron cuatro balazos’, ‘Corazón, corazón’, ‘Serenata sin luna’, ‘Amanecí en tus brazos’, ‘La mano de Dios’, ‘Retirada’, ‘Llegó borracho el borracho’, ‘Declárate inocente’, ‘Sin dejan’, ‘Cuando vivas conmigo’, ‘Pa’ todo el año’, ‘Palabras del cielo’, ‘No me amenaces’...

La lista de sus intérpretes es igualmente respetable. Entre los más representativos se encuentran Jorge Negrete, Pedro Infante, Miguel Aceves Mejía, Antonio Aguilar, Javier Solís, Vicente Fernández, Felipe Pirela, Roberto Ledesma, María Dolores Pradera, Lola Beltrán, Lucha Villa, Rolando La Serie, Celia Cruz, Julio Iglesias, y el Jefe, Daniel Santos.

En estos tiempos en que abundan los compositores y cantantes desechables es oportuno recordar a uno que llegó para no morir jamás: don José Alfredo Jiménez.

EL HERALDO
POR: FAUSTO PÉREZ VILLARREAL
Viernes 29 de Noviembre de 2013



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