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lunes, 7 de noviembre de 2011

GOMEZ Y VILLEGAS -Bodas de Plata

Detalle de Pintura. Se encuentra dentro del museo de la catedral- Extraído de video de history Channal.

El Museo de arte religioso de la catedral, se emplaza en un gran salón que conserva las proporciones y algunas características originales como los ladrillos a la vista, pero como el área fue intervenida para crear el semisótano para los osarios su pavimento es reciente. Además, cuenta con equipos que mantienen climatizado el recinto para preservar en buenas condiciones las obras. El museo fue establecido en 1995, no obstante, no se encuentra abierto al público.

La sacristía de la catedral es el único salón que quizás no ha sufrido modificaciones, se mantiene casi intacto de cómo fue construido. En él se guardan los objetos que son necesarios para las celebraciones religiosas, como por ejemplo hostias sin consagrar, cálices, casullas, etc., y es de paso restringido al público en general. El recinto es rectangular y amplio, los muros cuentan con el ladrillo a la vista, dispone de tres puertas: dos en la pared occidental que dan con el pasillo que comunica con las demás dependencias y la restante está en el muro sur y viene a dar con el brazo oriental del transepto. También cuenta con tres ventanas, todas ellas localizadas en la pared oriental, que dan sobre la carrera Ecuador.

Todos sus muebles fueron construidos por el ebanista Luis Eduardo Arenas y constan de una fina talla. Entre los que más se destacan están: en el centro del salón se localiza la "mesa de sacristía" de 1,10 x 4,90 x 1,70 metros, tallada en cedro negro, en estilo renacentista español, decorada con tallas de rombos y círculos con figuras de santos, cuenta con pequeñas alacenas para cada uno de los Canónigos. En la pared del norte de la habitación, está localizado un gran armario y tiene la distribución adecuada para guardar los ornamentos, fue hecho en cedro negro, en estilo renacentista español y decorado con tallas de rombos, círculos y motivos vegetales, costó $ 36.000. Existe también un reclinatorio de tres puestos debajo de la estación del Viacrucis (que en 1938 se envió como modelo para la Catedral), costó $ 15.000.

En lo alto de las paredes de la Sacristía se localizan los cuadros al óleo de todos los obispos y arzobispos de la arquidiócesis. Además, el salón cuenta con una pileta especial, el sacrarium, cuyo desagüe va directamente al suelo. Esta pileta se emplea para lavar los lienzos empleados durante la celebración de la misa y otros elementos empleados durante la comunión. También, se destaca en el centro del salón una lámpara de cristal, que data de 1931, es una araña Barigossi de estilo románico de la Fondería de Bronzi artística.

Lado 1
1. PAISAJE – Bambuco  -(Luis Carlos González • Enrique Figueroa)
2. DESDE LA PLAYA – Pasillo  -(V. Martínez Rivas - Alejandro Wills)
3. TRISTE ANTIOQUEÑO - Bambuco (Arturo Álzate Giraldo - L. Parra Toro)
4. LA ALONDRA - Pasillo (José David Cañizares)
5. EN EL FONDO DE TUS OJOS - Bambuco (Jerónimo Velasco - J. Uribe Ramírez)
6. POR ULTIMA VEZ - Pasillo (Carlos Villegas)

Lado 2
1. ADIOS CASITA BLANCA - Pasillo (Tomás Villarraga - Carlos Vieco)
2. CELOS • Bambuco (Jorge Camargo Spolidore)
3. INVERNAL – Pasillo  (José María Egas - Nicasio E. Safadi)
4. SEPULTURERO - Bambuco (D. R. de A.)
5. INVIERNO Y PRIMAVERA - Pasillo (Carlos Villafañe - Carlos Vieco)
6. MI UNICO ANHELO - Criolla (Carlos Villegas)


ADIOS CASITA BLANCA

Gómez y Villegas están cumpliendo, en este junio de 1972, 25 años de servicio permanente a los enamorados antioqueños y a la música de Colombia, como dueto. Y no como un dueto cualquiera, sino como fundamental expresión del ambiente nocturno de la capital antioqueña.

Junto a Obdulio y Julián, el Dueto de Antaño, Espinosa y Bedoya, el Dueto Tiscayá, el desaparecido binomio de Los Carlos y alternando con tríos que marcaron brillantes etapas de la canción criolla, como Los Romanceros, el Trío de Hoy, el Torbellino, el Continental, etc.

Carlos Villegas es de Villa María, la ciudad que cantara Luis Carlos González, conocida también como La Aldea, cerca a Manizales, y del 16 de abril de 1918.

Don Luis, su padre, pianista y ejecutante de instrumentos de cuerda, le dio las primeras nociones, pero como sólo contaba 15 años de edad Carlos cuando se produjo su deceso, ingresó por cuenta propia al Conservatorio de Manizales, y estudió canto, vocalización e impostación durante un año al cabo del cual se trasladó a Armenia en donde cantó a dúo con Bernardo Arcila, conocido intérprete quindiano, participando en programas estelares de la radio local.

Los hermanos de Carlos también fueron intérpretes populares. Ernesto es uno de los más calificados compositores típicos de Colombia. Con otros dos, Enrique y Camilo, conformó una estudiantina que recorrió importantes ciudades y fue estrella en programas de La Voz de Colombia de Bogotá. Carlos y Enrique integraban el dueto canoro del grupo, Los Hermanos Villegas, y tuvieron un resonante suceso en la capital del país a partir de 1941 y durante cuatro años, cuando se disolvieron y comenzó una etapa de solista en la vida de Carlos, iniciada en una orquesta de Buenaventura.

En el año de 1945, se encontraron por primera vez, en Cali, a donde el cantor viajó al terminar su compromiso en el puerto. Fue en las mesas bohemias de "Aquí es Miguel" de donde era contertulio Julio Gómez, nativo de la población antioqueña de San Pedro -14 de abril de 1913- y con una interesante trayectoria artística como discípulo de Pedro Pablo Santamaría, colaborador de las orquestas rítmicas que en Medellín animaban los grilles de los hipódromos San Fernando y La Floresta y estrella radial por cuanto actuó muchas veces a dúo con Obdulio Sánchez en audiciones de la vieja Voz de Antioquia.

A pesar de que Gómez y Villegas cantaron juntos su primer bambuco allá en las noches cálidas de "Aquí es Miguel", y fue, recuerdan, "Semblanza" de Ambrosio Talero, sólo se constituyeron como pareja definitivamente, en 1947 y en Medellín.

El dueto se denominó inicialmente Los Nativos. Pero el nombre no hizo carrera y nunca lo usaron en sus grabaciones, las primeras de las cuales tuvieron lugar en el año de 1949 en SONOLUX, con acompañamiento de la orquesta de Carlos Vieco. En ese mismo año formaron el "Trío Indoamérica" que duró 4 años y que integraron con el cantor costeño Osvaldo Suárez. En el "Trío Indoamérica" hubo posteriormente otros cantores hasta que decidieron Gómez y Villegas que era mucho mejor el dúo y como tal siguieron oficiando.

En el año de 1960, Gómez y Villegas hicieron un tremendo impacto fonográfico con el bolero "Únicamente Tú" y siguieron grabando discos con éxito creciente, siempre en SONOLUX la empresa que ahora les rinde el homenaje merecido por su profesionalismo, su cariño por lo nuestro y la belleza de sus voces.

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